Vinos para triunfar estas fiestas por menos de 12 euros

Cuenta atrás para que lleguen todos los eventos con familiares y amigos si nada lo impide. Muchos de vosotros ya estaréis haciendo acopio de buenos vinos para estas fiestas. Hoy en Peñín queremos lanzar una propuesta divertida y diferente para estas Navidades. Nos hemos propuesto alejarnos de los convencionalismos para mostraros otras opciones de grandes vinos españoles. En esta ocasión hemos querido poner un límite de precio de 12 euros por botella para que acompañar las fiestas con estos vinazos no cause una gran baja a nuestras finanzas. Nueve vinos, todos ellos con 93 puntos en la última edición de la Guía Peñín 2022. ¿Listos?

En Coruña del Conde, provincia de Burgos, se encuentra nuestra primera propuesta para estas Navidades. Se trata de un vino que rinde homenaje a una variedad muy local y no muy conocida como la blanca albillo real. En sus inicios, esta bodega estuvo asesorada por el grupo de Envinate, quienes también nos dejarán hoy un vino para esta selección navideña. Ermita del Conde Albillo Mayor 2016 es un vino que crece en un clima continental extremo, frío helador en invierno y gran calor en verano. Altitud(943 – 1012 metros), suelos calizos acompañados de mayor o menor porcentaje de arena y en algunas, canto rodado. Todo ello apunta a un vino con fuerza. Fruta madura, pan tostado, especias, roble cremoso y una boca grasa y estructurada, son algunas de las señas de identidad este vino, capaz de ocupar un lugar importante en nuestra mesa.

Acudimos a un vino con cierta vejez. Añada 2016 de una uva tempranillo que crece a 5 km de Olmedo (Valladolid), zona habitualmente de vinos blancos, pues es uno de los pueblos reconocidos por la D.O. Rueda.  La bodega se encuentra en lo que fue un antiguo monasterio Jerónimo, en un entorno único y excepcional. Como curiosidad, apuntar que el conjunto ha sido restaurado y adaptado por el arquitecto Rafael Moneo. Esta casa se caracteriza fundamentalmente por la elaboración de vinos tintos con gran expresión frutal y por la búsqueda de finura y elegancia a través de una tipología de vinos que cuenta de por sí con estructura y taninos. Esta propuesta recoge esa elegancia a la que hacemos mención, con taninos finos y sedosos, y viene acompañada por una fina reducción que lo hace muy interesante.

Ponce es una casa que nos tiene acostumbrados a grandes vinos muy identificados con lugar de origen. Esta bodega familiar lleva desde su primera añada de 2005 haciendo vinos sinceros y honestos, como este La Xara 2019, que nos acerca a la visión local de una garnacha de interior rica en fruta roja y muy floral y silvestre. Un vino sabroso y con buena acidez que servirá para empezar a abrir boca en alguna de nuestras veladas. Se trata de un vino desenfadado y muy disfrutón.

Viramos hacia un vino de corte estructurado, con cuerpo y sabor, que lleva el sello geográfico de Jumilla y su reina de viñas, la monastrell. Bodegas Juan Gil nos ofrece su Etiqueta Plata, un vino que procede de una selección viñas viejas trabajadas a muy bajos rendimientos. Se trata del vino de mayor éxito de esta casa pues posee una excelente relación calidad precio. Una oportunidad de bucear por la tipicidad de la monastrell a través de una elaboración respetuosa con la identidad de la zona.  

Bajo la denominación de origen Almansa crecen las uvas de garnacha tintorera de nuestro siguiente protagonista de hoy. Se trata de un viñedo plantado entre 1970 y 1980 en los alrededores de Alpera, sobre suelos arenosos con rocas de caliza pura. Se trata de una de las últimas creaciones de Rafael Cañizares, un vino que guarda toda la identidad de la garnacha tintorera. Un vino con fuerza y estructura que cuenta con un marcado carácter frutal (fruta roja madura) y con notas a violetas y hoja de té. La boca es contundente, con tostados presentes y unos taninos maduros.

No es casualidad que nos encontremos ante otro monastrell jumillano en esta selección de vinos para Navidad. Jumilla cuenta con grandes vinos a precios asequibles y este de Casa Castillo es un buen ejemplo. En esta ocasión hemos acudido a un vino de una cosecha reciente con el fin de mostrar el estilo monastrelero en una cosecha joven, donde destacarán las notas aceradas características de la monastrell con un marcado carácter de fruta negra. Se trata de un vino sabroso, mineral y muy persistente.

Casa Aurora nos ha dejado este año uno de los nominados a vino revelación, La Galapana. Hoy es el turno de Clos Pepín, su vino de pueblo. Se trata de un vino elaborado a la antigua usanza, donde se mezclan diferentes tipos de uva: garnacha tintorera, palomino (40%), portuguesa (trousseau), garnacha y mencía, de las viñas viejas de diferentes viticultores del Valle de Boeza, en la región del Bierzo. Es un vino que ha sido etiquetado como vino de mesa y que posee un marcado carácter balsámico, con hierbas de monte y una fruta roja muy interesante que se entremezclan con las especias. Se trata de un vino muy gastronómico y desenfadado.

Envinate se caracteriza por buscar la esencia local allá donde elaboran, como este vino de mesa que hoy proponemos. Se trata de un tinto elaborado con garnacha tintorera y moravia agria de la zona de Alpera, donde la garnacha tintorera reina a sus anchas. Los suelos arcillo-calcáreos y el clima continental son en gran medida los responsables de la identidad de este vino elaborado en hormigón y con un alto porcentaje de raspón, lo que aporta frescura y un estilo silvestre al conjunto. Nos encontramos ante un vino de cuerpo medio, rico en fruta negra y roja. Posee un trago fácil y un estilo poco intervencionista. Una forma diferente de adentrarnos en la garnacha tintorera albaceteña de la mano de unos excelentes creadores de vinos singulares.

Bruno Murciano nos trae desde su tierra natal un excelente bobal, desenfadado, frutal y silvestre. Se trata de un vino elaborado con uvas del paraje de las Hoces del Cabriel, de un pago conocido como Las Brunas. Las Brunas son 7,69 ha de viña que se encuentran en la ladera de un pie de monte con orientación sureste sobre un suelo arcillo calcáreo. Las viñas se encuentran rodeadas de arbusto mediterráneo, carrasca, plantas aromáticas y pinos que dejan su impronta en el vino a través de unos matices a hierbas silvestres francamente interesantes.