Los 100 puntos de la Guía Peñín: Alabaster 2022, la potencia y finura de la tinta de Toro

25 September 2025

Durante más de una década, Alabaster ha representado la cara más elegante, precisa y profunda de la tinta de Toro, consolidándose no solo como uno de los grandes vinos de la DO Toro, sino también como uno de los grandes tintos de España. La añada 2022 reafirma esta posición con la perspectiva de un vino que, sin renunciar a su potencia, incorpora con maestría frescura, profundidad y refinamiento.

En un contexto enológico que valora cada vez más los vinos ligeros y de menor extracción, Alabaster 2022 se mantiene firme como ejemplo de que los vinos con estructura y profundidad siguen teniendo pleno sentido cuando están bien construidos desde el viñedo. Esta magistral definición de la tinta de Toro parte de la mano experta de Marcos Eguren, uno de los enólogos más influyentes del país y figura clave en la modernización de Toro y Rioja. No se entendería la trascendencia de este vino sin recaer en la figura de su creador.

Marcos Eguren, uno de los enólogos más influyentes del país y figura clave en la modernización de Toro y Rioja.
Marcos Eguren, uno de los enólogos más influyentes del país y figura clave en la modernización de Toro y Rioja.
Marcos Eguren en el viñedo de la bodega.
Marcos Eguren en el viñedo de la bodega.

Marcos es la personificación del bodeguero volcado en la viña. Y lo es desde hace mucho tiempo, antes incluso de que la nueva hornada de productores decidieran ocultar en el guion la parte elaboradora, como si la mano del hombre fuese algo malo en ese papel clave que juega la interpretación de un lugar. Su conocimiento profundo del territorio, su manejo sensible de las viñas viejas y su enfoque honesto lo han convertido en un claro referente del vino de altos vuelos de nuestro país.

Este vino procede de una selección de viñedos prefiloxéricos, cultivados con el máximo respeto en suelos de origen arenoso, con un subsuelo arcilloso y de canto rodado, en altitudes superiores a los 700 metros. Estas condiciones y la perfecta lectura del año climático les ha permitido obtener una uva con gran concentración, pero también con una acidez equilibrada, clave para lograr la tensión y recorrido de la que hace gala.

La vinificación de Alabaster parte de una selección grano a grano, una maceración prefermentativa en frío y fermentación en tinas de madera a baja temperatura, con bazuqueos periódicos para asegurar una extracción controlada. Realiza una crianza en barricas nuevas de roble francés de grano extrafino durante 18 meses, lo que permite una integración paulatina de los taninos y una mayor complejidad aromática sin enmascarar la expresión frutal del vino.

Cepa del viñedo La Jara.
Cepa del viñedo La Jara.
Suelo del viñedo La Jara.
Suelo del viñedo La Jara.

Alabaster 2022 presenta un perfil muy preciso, basado en la concentración propia de esta región, pero sin abandonar la frescura y profundidad tanto en nariz, como en boca. En este vino destacan las notas de mora negra, arándano, regaliz, cacao amargo y finas especias; pero también una clara mineralidad que se ve arropada por notas balsámicas que aportan frescura.

Es amplio, estructurado, con taninos maduros muy bien integrados, sedosos, una acidez perfectamente equilibrada y una sapidez final que alarga su recorrido sin saturar. La sensación global de Alabaster 2022 es de armonía entre potencia y elegancia, un equilibrio que muy pocos productores son capaces de plasmar en un vino con tanta precisión, y todo ello mostrando con maestría el terroir de Toro.

Los 100 puntos obtenidos por la añada 2022 son el fruto de una evolución constante. No solo la del vino, que ha ido afinando su estilo sin perder su carácter e identidad, sino también la de la percepción crítica hacia la tinta de Toro, una variedad que, bien interpretada, ofrece vinos con grandeza, longevidad y personalidad única. Alabaster 2022 reivindica con atronadora fortaleza que la potencia puede convivir con la finura en tiempos donde la fluidez en el vino es una clara tendencia que puede llegar incluso a desvirtuar su tipicidad de origen.

    Escrito por Javier Luengo, director editorial de Peñín