San Román Garnacha 2019, un nuevo futuro para la garnacha de Toro

7 octubre 2021

Pocos podrían pensar que uno de los Vinos Revelación de esta edición de la Guía Peñín llegaría de la denominación de origen Toro. Las grandes zonas es lo que tienen, que en ellas ‘revelar’ una nueva trayectoria o camino cuesta mucho más.

Nominado Viñas del Cámbrico Rufete Blanca

Toro se conserva en nuestra retina como una zona donde conviven grandes vinos tintos, algunos incluso reconocidos como clásicos dentro del amplio espectro tipológico de vinos que existen en España. Sin embargo, en esta zona tan respetada, no estamos acostumbrados a encontrar grandes cambios, al menos en lo que a reglamentación se refiere. Así que cuando su consejo regulador anunció un cambio de calado en su reglamentación supimos que alguna consecuencia positiva traería consigo, aunque para ser sinceros no esperábamos que tardase tan poco en llegar.

San Román Garnacha 2019 es la mejor representación monovarietal de garnacha que llega a nuestra mesa con sello Toro, tras el último cambio aprobado en su reglamentación a comienzos de este mismo año. Gracias a esta modificación, los vinos tintos de Toro ya no están obligados a trabajar con una mayoritaria tinta de toro en su confección. Con este cambio y desde este año, las bodegas ya pueden elaborar vinos monovarietales de garnacha siempre y cuando esté presente en, al menos, un 85%.

Una de las primeras bodegas en responder a esta oportunidad estilística dentro de Toro ha sido la bodega San Román. La casa fue creada por el mítico Mariano García, el que fuera durante 30 años responsable de los vinos de Vega Sicilia en la etapa en la que la bodega se convirtió en icono.

Mariano García  también fue creador de Aalto junto a Javier Zaccagnini y también tuvo tiempo de crear sus propios proyectos familiares como Mauro, Garmón Continental y San Román, hoy también en manos de la segunda generación familiar, Eduardo y Mauro Alberto.

San Román Garnacha ha llegado en el mejor momento posible, pues ha respondido con el don de la oportunidad creando un vino de garnacha de perfil alto, manteniendo el estilo de la casa basado en el sabor, el equilibrio y en crianzas bien ensambladas.

Hablando con Eduardo García, responsable de la parte de viticultura y enología de la bodega, nos recuerda que cuando su padre llegó a Toro en el año 97 la garnacha estaba presente en la zona, pero se estaba arrancando. “Es una variedad que se introdujo en la zona más o menos en la década de los Sesenta y que venía directamente de Navarra -afirma Eduardo- por eso los viticultores de la zona la llaman la navarro”.  Sin embargo la garnacha no contaba con la fama y el prestigio que tiene a día de hoy, así que los lugareños la sustituían por uvas como la cabernet o merlot. En San Román poseían por aquel entonces 15 has de viñedo, de las cuales, tan solo dos eran de garnacha. Hoy día reúnen 130 has y 15 son de garnacha, lo que supone cerca de un 16% de la presencia de esta variedad en toda la D.O.

Eduardo GarcíaEduardo García

Hasta la fecha, la garnacha toresana solo se podía utilizar para vinos de ensamblaje y en un porcentaje muy minoritario, lo que hacía que estos vinos acabasen embotellados como vinos de la tierra o incluso como vinos de mesa. Sin embargo, con los cambios aceptados este año se abre un nuevo escenario para los elaboradores de la zona, como lo demuestra San Román.

Falta todavía por resolver un asunto en la zona, que se puedan elaborar vinos de cupaje de tinta de toro y garnacha con porcentajes libres, porque tal y como está el reglamento actual, “solo puedes elaborar dos tipos de vinos tintos: vino tinto con, al menos, un 85% de garnacha tinta y vino tinto con, al menos, un 75% de tinta de Toro”, algo que no tiene mucho sentido y que entendemos será corregido pronto.

San Román garnacha 2019 tuvo una cosecha predecesora, la 2018, de la cual se elaboró tan solo una barrica de 500 litros, unas 600 botellas. Este vino salió al mercado este mismo año 2021,  pues desde bodega fueron conscientes de que si esperaban un poco más para presentarlo podrían embotellarlo con el sello de la D.O. Así que aguantaron un poco más de tiempo a que el reglamento les permitiese etiquetarlo como vino amparado por la denominación de origen.

Uva garnachaUva garnacha

Meses más tarde llegaría esta cosecha 2019, donde ya se produjeron 1.900 botellas (3 barricas de 500) y que saldrán a la luz este mismo otoño. La producción de esta gran garnacha está limitada a un solo pago. Se trata del Pago de los Almendros, una viña de 1,4 has plantada en el 64 y que se encuentra en el paraje de El Monte, en el municipio de Villaester. Ubicada a 710 metros de altitud, posee un suelo de arena muy profunda con un poco de cascajo y un fondo de arcilla ubicado a gran profundidad, lo que para sus creadores hace que el vino tenga un perfil más aromático y tenga una mayor capacidad de sostener su sabor y finura durante más tiempo.

San Román Garnacha 2019 es un vino que abre nuevos horizontes en la D.O. Toro con la posibilidad de ofrecer embotellados con menor capa, menos estructurados, más frutales, florales y frescos, ampliando la gama de vinos que hasta ahora la zona podía ofrecer. Las próximas cosechas en Toro seguro que traerán nuevas ofertas garnacheras que irán conformando un dibujo más preciso sobre el comportamiento de esta variedad en este rincón productor. De buenas a primeras, esta familia del vino ha dado en el blanco con una garnacha de altos vuelos, marcando una meta a superar para futuros elaboradores.

    Escrito por Javier Luengo, director editorial de Peñín