Imagínatelo: después de vencer el primer obstáculo y seleccionar el mejor vino del supermercado gracias a nuestros consejos, con la cena preparada y los invitados esperando, de repente: catástrofe. No hay sacacorchos. Tranquilo, que no cunda el pánico, hoy te enseñamos la mejor forma de abrir una botella de vino sin sacacorchos.
Ante esta terrible situación, el mundo se divide. En primer lugar, están los que se rinden y buscan otra bebida (por favor, no seas de esos); después están los temerarios que improvisan con lo primero que tengan a mano; y, por último, estás tú, que has decidido buscar en Internet la mejor solución.
Estás de suerte, los amantes del vino (o los más desesperados) han desarrollado técnicas y métodos que ni te imaginarías. Algunos son brillantes, otros te sorprenderán y un par de ellos te harán replantearte la decisión. Hoy te ofrecemos un manual que te salvará de esta situación, con una clasificación de efectividad y riesgo.
Método del tornillo y el alicate
Si unes un tornillo largo, un destornillador y un alicate, voilà, tienes un sacacorchos casero. Para llevar a cabo esta técnica solo tienes que enroscar el tornillo en el corcho y tirar con el alicate.
También puedes utilizar las típicas tijeras de punta redonda: ábrelas del todo y clava una de las hojas en el corcho; sujetando la botella, ve girando las tijeras por la empuñadura y sacarás el corcho.
Empujar el corcho hacia dentro
Si no te importa que el corcho acabe flotando en el vino, con el mango de una cuchara, un bolígrafo o el envase de un pintalabios, haz presión sobre el corcho hacia abajo y caerá.
método del zapato
Sí, has leído bien. Con un zapato y mucho cuidado podrás descorchar una botella de vino. Para ello, tienes que introducir la parte inferior de la botella dentro de un zapato plano; después, golpea suavemente la suela del zapato contra la pared, manteniendo sujeta la botella y asegurándote que está en posición horizontal. No uses toda la fuerza o correrás el riesgo de romperla botella y ensuciarlo todo; con paciencia y golpes suaves, el corcho irá saliendo.
la llave maestra
Introduce una llave resistente (o un cuchillo) en un ángulo de 45º y gíralo suavemente mientras vas tirando hacia arriba. Paciencia y cuidado, que no queremos que la velada se vea interrumpida por una visita a urgencias.
método del calor
Sólo recomendable para los más valientes y/o desesperados. Si calientas el cuello de la botella con un mechero o una fuente de calor, el aire de dentro se expandirá y empujará el corcho hacia afuera.
la percha de alambre
Se trata de enderezar el gancho de la percha hasta que quede completamente recto; y después formar un pequeño gancho, como si fuera un anzuelo. Al introducirlo en el corcho, hará la función de un sacacorchos. No es la opción más recomendable a no ser que seas especialmente mañoso.
Con estos trucos y consejos, esperamos haber sido de ayuda sin algún día necesitas abrir una botella de vino sin sacacorchos. ¿Es ideal abrir una botella así? Rotundamente no. ¿Son útiles ante una urgencia o necesidad? Absolutamente sí. Elige sabiamente entre estas opciones, aunque nuestro mejor consejo es: compra más de un sacacorchos y guárdalos en diferentes puntos de la casa, así cuando te falle uno tendrás repuestos desperdigados por la casa.
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Saciado de visitar durante toda mi vida profesional las zonas afamadas, me he trasladado a la Alcarria, a los estribos de la Sierra de Culebras en Zamora o a los pies pirenaicos de Sobrarbe de Huesca.
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