Un péndulo define una trayectoria inicial hacia un lado para posteriormente, cuando ha llegado a su culmen, iniciar un camino de regreso usando la misma trayectoria que finaliza en el mismo punto en el que empezó. Así se comporta el vino de tendencia más vanguardista si tomamos como referencia un amplio espacio de tiempo, aunque en el momento no nos demos cuenta. El mundo del vino es bien curioso en este aspecto, pues el péndulo arrastra consigo estilos y discursos que se van adaptando al momento exacto por el que circula este péndulo.
¿Les suena como el “buen” vino de hoy ha de ser muy frutal, autóctono a ser posible, poco intervencionista y ligero para favorecer su bebilidad? Este modelo, hoy muy extendido entre los más jóvenes productores, obedece a una tendencia, la llamada borgoñización del vino. El péndulo, en su limpia y predecible trayectoria, venía de la concentración, la madurez y la crianza generosa, avalado por una prensa especializada que entendía esa exuberancia como un cúmulo de virtudes, al sentir en sus propias carnes una explosión de aromas y sabores que sacudían su pituitaria y los animaba a escribir profundos análisis del vino. El péndulo debía fijar un horizonte, un modelo adoptado como referente. El de entonces fue Burdeos. No eras un profesional del vino respetado si no corría Burdeos por tu sangre, si no te dejabas ver en los selectos círculos de la alta sociedad vinatera de los châteaux bordeleses.
Los vaivenes del vino
El péndulo ha cambiado de posición y ha llegado a su otro extremo. El modelo actual, alimentado por los nuevos proyectos y los enólogos más vinculados a la “nueva ola”, ha fijado su meca en Borgoña y en su estilo de vinos sutiles y elegantes. Es ahora cuando no eres nadie si no te dejas beber en los grandes vinos de borgoña, tan elegantes como complejos. Los jóvenes productores han viajado a Borgoña, se han emocionado en sus viñedos y han bebido sus vinos. Han profundizado en sus localismos, en la identidad microterritorial y se han visto poseídos por el espíritu de Borgoña hasta tal punto que es Borgoña lo que han tratado de hacer en sus respectivos lugares de origen.