Rioja, el mestizaje a orillas del Ebro

8 julio 2021

Rioja, la denominación de origen más reconocida de España está siempre bajo la atenta mirada del resto de regiones productoras, pues en función de su actuación se adecúan las campañas de muchas otras que buscan aprovechar el hueco o la diferenciación con quien más capacidad de venta tiene. Queremos hacer un repaso por las últimas catas realizadas y también hacer hincapié en los puntos fuertes de la región más envidiada y los puntos de mejora que creemos que puede llegar a tener.

Si en los últimos años podíamos apreciar cierta homogeneidad, a veces tediosa, en las catas de muchos riojas, este año observamos cómo se va abriendo la mano a otras elaboraciones y estilos que enriquecen la oferta de la región. La proliferación de vinos más raciales y silvestres con uvas como la graciano, por ejemplo, de Contino, Altos de Rioja, Abel Mendoza o Amaren y la maturana tinta en tintos de casas como la de Barón de Ley, Vivanco, Viña Ijalba, Corral o Juan Carlos Sancha nos ha permitido poder interpretar otro concepto que antiguamente no encontrábamos. Por su parte, las garnachas de la Rioja Oriental tan florales como maduras y amables, llenan el lienzo con una pincelada más de color y, por supuesto, los tempranillos, monográficos algunos, enlazados con la variedad mazuelo y graciano otros, los clásicos, los antiguos “alta expresión”, los de “autor”, etc.

Este año también hemos observamos que la tipología de vino blanco de guarda se va asentando y mostrando su potencial de crecimiento. Hace pocos años, los blancos giraban más a un perfil joven y de más de volumen, frente a los escasos proyectos de blancos de guarda. Hoy, como existe un consumidor más maduro que entiende estos vinos blancos de más crianza, es rara la bodega que no tiene su blanco de crianza o guarda de alta calidad. La zona tiene cualidades contrastadas para desarrollar estos vinos elaborados con viura, garnacha blanca, maturana blanca y, en menor medida, la tempranillo blanco. Si bien todavía es un reto dominar la crianza de estos vinos para que todo conjugue a la perfección. Algunos de los mejores ejemplos del universo blanco los hemos encontrado en Capellanía 2016, Remelluri 2018, Mártires 2018, Nivarius Edición Limitada 2017 o Viuda Negra Villahuercos 2018.

Rioja es, hoy más que nunca, un lugar donde existe un mestizaje elaborador, tanto a nivel conceptual, como a nivel varietal. Como lugar diverso que es, requiere de una actuación a través de diferentes líneas y argumentarios, desde el nivel global y accesible hasta los vinos de mayor calidad. Todos requieren su campaña y su difusión, pues todos aportan al conjunto. 

Viñedo Rioja

A pesar de las dimensiones de Rioja, tan pequeña y tan grande a la vez, tiene, efectivamente, diferentes realidades y sensibilidades en su interior. Basta con hacer nuestro habitual recorrido de cata por sus vinos, este año fueron más de 1.000 catas, para entender que no basta una única línea de actuación y de comunicación para dar satisfacción a todos sus productores, pues las realidades son diversas.

Por si no éramos conscientes, la COVID 19 llegó para demostrarnos que no todos somos iguales, pues este virus ha sido capaz de afectar a los productores de vino de forma desigual, asfixiando hasta la extenuación a algunos y pasando con menos virulencia sobre otros. No todos producen lo mismo, no todos venden sus productos por los mismos canales y no todos tienen acceso directo al cliente final.  A nivel de cata, estas diferencias se hacen muy evidentes pues no todos los vinos están destinados al mismo consumidor, ni tienen el mismo precio. Realidades diferentes requieren actuaciones diferentes. Y en este marco encontramos actualmente a Rioja tras el desarrollo e implementación de su categoría de Viñedos Singulares.

¿Cuántos viñedos singulares tiene Rioja?

Hasta la fecha en Rioja se han autorizado más de 120 viñedos singulares y todavía se esperan más. Lo que nos trasladaba recientemente en una entrevista Pablo Eguzkiza, socio en la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez, es lo difícil que resulta argumentar una categoría “singular” que cuenta ya con un gran número de productos singulares en su interior. Lo dice una de las figuras más relevantes en la producción de vinos legendarios de La Rioja, porque desde su experiencia, estos vinos no son comparables a muchos otros. Entendemos que el cielo de una región productora, al final, no es un lugar colmado de gente, pues es lo más exclusivo de un lugar y la exclusividad y la excelencia no es clonable.

Viñedo Rioja

Existe en Rioja un nivel altísimo de productores, que bien podrían ubicarse en un peldaño inferior a esta exclusivísima élite. Hablamos de productores de referencia en el lugar,  capaces de hacer vinos inolvidables, de una calidad excepcional, vinos de los que hacen marca Rioja y que, por sus características, bien pueden encajar en una categoría sensiblemente inferior aportando igualmente un gran valor al conjunto.

Requisitos para ostentar el  distintivo de Viñedo Singular.

Existen también otros muchos vinos que, o no encajan o no quieren tener este “label” de manera voluntaria, pero que, sin embargo, representan con soltura la mejor imagen del Rioja. Son grandes productores de vinos míticos en la región, que aun siendo capaces de entrar en la categoría de Viñedo Singular no etiquetan sus vinos como tal, por entender que esta categoría no colma sus expectativas diferenciadoras. Muchos de los productores más conocidos en la D.O. han prescindido de su uso, lo que acaba de restar peso a esta categoría. Nadie puede dudar que La Nieta de Marcos Eguren, Las Beatas de Telmo Rodríguez, Valmira de Álvaro Palacios o La Condenada de Artuke, por poner alguno de los mejores ejemplos parcelarios hechos vino, son viñas singulares. Visto esto nos hace preguntarnos si todavía falta una categoría superior para dar cabida a todos ellos. Aunque quizá la categoría perfecta no llegue nunca por mucho que se esfuerce la D.O., pues está por ver si estos reconocidos productores querrían convivir al mismo nivel en una misma categoría con nuevos actores de menor nombre comercial.

A pesar de todas las complicaciones reguladoras, la cata de los vinos de Viñedos Singulares que hemos realizado este año nos ha demostrado que los vinos cumplen con el nivel cualitativo que se espera de ellos. Sorprende que casi la totalidad de estos vinos responden a un perfil de vino moderno: muy expresivo, potente y frutal.

Los riojas clásicos

Si existe un estilo íntimamente vinculado con Rioja, ese es el clásico, un vino que ha sido capaz de posicionar a la denominación de origen de forma clara y evidente a través de la cata de sus vinos por medio mundo. La categoría Gran Reserva no siempre muestra el estilo clásico al que nos referimos, pues algunos vinos no se adentran con generosidad en el mundo de los aromas terciarios, casi una obligación para estos vinos, al menos es lo que se espera de ellos, una cierta vejez en sus matices. La Rioja Alta Gran Reserva 890 2005, Castillo Ygay 2010 y Marqués de Riscal Gran Reserva 2015 son excelentes ejemplos de la sutileza y elegancia de esta categoría perfectamente definida.

    Escrito por Carlos González, director de la Guía Peñín
    Escrito por Javier Luengo, director editorial de Peñín